No estás solo. Muchos padres conocen el problema: el bebé no quiere dormir. Es un fenómeno común y puede tener varias razones. Por supuesto, ayuda entender mejor el sueño del bebé. Aquí tienes algunas explicaciones y consejos que pueden ayudarte a garantizar un mejor sueño a tu bebé.

Contenido

1. ¿La vida cotidiana agobia a tu bebé?
2. El ritmo de sueño del bebé
3. El entorno adecuado para dormir - la cuna adecuada
4. Suficiente actividad durante las horas de vigilia
5. La temperatura adecuada para dormir
6. Saco de dormir
7. Conclusión

¿Qué puedo hacer yo?, para que mi bebé duerma mejor?

1. ¿Su bebé está agobiado por la vida cotidiana?

Los bebés son pequeños exploradores. Son muy conscientes de lo que les rodea y cada día aprenden algo nuevo. Esto puede convertirse rápidamente en demasiado para ellos. Por eso, procure que su rutina diaria sea lo más tranquila y estructurada posible. Una rutina diaria fija, con horarios fijos para acostarse y paseos no demasiado largos, puede ayudar a regular el ritmo de sueño del bebé.

2. El ritmo de sueño del bebé

El sueño es un tema complejo que supone un reto para muchos padres. En los primeros meses de vida, los bebés aún no tienen un ritmo fijo de sueño-vigilia; duermen y se despiertan a intervalos irregulares. Es importante entender que los bebés tienen un ciclo de sueño diferente al de los adultos en las primeras semanas y meses de vida. Pasan más tiempo en sueño REM, que es necesario para el crecimiento y el desarrollo del cerebro. Por lo tanto, es normal que los bebés se despierten a menudo.

Aunque muchos bebés duermen entre 17 y 20 horas al día, otros pueden necesitar muchas menos. Las necesidades de sueño de un bebé varían en función de su edad. Aquí tienes un pequeño resumen de las necesidades de sueño:

• 0-3 meses: 14-17 horas de sueño al día
• 3-6 meses: 12-15 horas de sueño al día
• 6-9 meses: 12-14 horas de sueño al día
• 9-24 meses: 11-14 horas de sueño al día.

Sin embargo, con el tiempo desarrollan un ciclo de sueño más regular. Es útil crear un entorno y una rutina de sueño constantes para ayudar al bebé a desarrollar un ciclo de sueño-vigilia saludable. Esto puede incluir poner al bebé en la cuna siempre a la misma hora, introducir rituales de sueño calmantes y asegurarse de que el entorno de sueño es tranquilo y cómodo.

3. El entorno de sueño adecuado - la cuna adecuada

El entorno de sueño desempeña un papel importante en la calidad del sueño del bebé. Una habitación tranquila y oscura y una temperatura agradable para dormir son importantes. Una cuna con un buen colchón también puede ayudar a tu bebé a dormir mejor. Un dosel para la c una puede ayudar a separar visualmente la cama y dar a tu bebé una sensación de seguridad.

Lee más sobre la cuna en el siguiente artículo: Guía de la cuna: sueño seguro y reparador

4. Suficiente actividad durante las horas de vigilia

El movimiento es importante para el desarrollo de tu bebé. Ayuda a fortalecer el cuerpo y a desarrollar la motricidad. Un triángulo Pikler puede ser una buena forma de mantener ocupado a tu bebé al tiempo que le das la oportunidad de desahogarse. Así, después de jugar, estará cansado y podrá dormirse mejor.

RICKI RACKA®

Triángulo de escalada con tobogán

5. La temperatura adecuada para dormir

La temperatura ideal para dormir para tu bebé ronda los 18-20 grados centígrados. En verano, basta con un body, mientras que en invierno es adecuado un saco de dormir Baby Winter. Asegúrate de que el saco de dormir del bebé no sea demasiado cálido en invierno para evitar el sobrecalentamiento.

El colchón del bebé debe ser firme y estar bien ventilado. Un colchón para bebés de 70x140 o de 60x120 suele ser una buena elección. Evita las mantas o almohadas adicionales en la cuna del bebé, ya que pueden aumentar la temperatura.

Siente la temperatura de tu bebé en el cuello o el pecho. La piel debe estar templada pero no caliente. Presta atención a las señales de tu bebé y ajusta la ropa y la temperatura de la habitación en consecuencia.

6. Saco de dormir

Un saco de dormir para bebés puede ser una buena alternativa a la manta. Mantiene caliente al bebé y evita que se tire de la manta para taparse la cabeza. Hay distintos modelos para verano e invierno, para que tu bebé siempre tenga la temperatura adecuada. Pero, ¿puede el bebé darse la vuelta en el saco de dormir? Sí, es posible y no supone ningún problema. Es importante que el saco de dormir sea del tamaño adecuado y no demasiado grande. Así tu bebé no podrá enredarse en él.

7. Conclusión

Hay muchas razones por las que tu bebé no quiere dormir. Lo importante es mantener la calma y probar diferentes cosas. Cada bebé es diferente y lo que funciona para uno no tiene por qué funcionar para otro. No te rindas y recuerda: esta fase también pasará.